Un cuidador de ancianos no debe ser una persona pasiva que solamente cumpla el horario estipulado y cuide de los abuelos en las necesidades comunes. El cuidador de ancianos según lo entendemos nosotros, debe ser una persona que ayude a mejorar la calidad de vida de las personas mayores, a través de actividades que fomenten el envejecimiento activo.
Los objetivos específicos que queremos remarcar son:
- Potenciar la participación e integración de los Mayores en la vida de la comunidad: Acompañar a los abuelos a que continúen integrados a la vida normal de la comunidad a la que pertenece. Que puedan sentirse útiles a la sociedad como lo han sido toda la vida. Fomentar las relaciones interpersonales y de convivencia de los mayores en su propio entorno.
- Promover actividades socio-culturales, ocupacionales, artísticas y recreativas: reuniones de abuelos en plazas, clubes, talleres artísticos y todo lo que genere una dinámica que ayude a prevenir situaciones de deterioro físico y/o cognitivo que van unidas al proceso de envejecimiento.
- Estimular el mantenimiento activo tanto a nivel físico como psicológico de las personas mayores: la práctica de deportes que un anciano pueda realizar de acuerdo a su salud general, ayuda a mejorar su condición física y mental. Un cuidador de mayores debe alentar y potenciar estas tareas.
- Crear espacios nuevos y formas nuevas para la ocupación del ocio y tiempo libre.
- Impulsar la cooperación y el voluntariado: ocupar el tiempo vacío de nuestros abuelos es fundamental y si logramos que además puedan sentirse útil, le estaremos ayudando a mejorar su autoestima y capacidad de colaborar con el resto de la sociedad.
- Promover la conciencia de utilidad y autoestima en los mayores:- Promover encuentros intergeneracionales, entre la familia o la sociedad. Estos espacios de encuentro entre personas que pertenecen a generaciones diferentes ayudan a intercambiar la riqueza que cada una de ellas puede ofrecer entre todos
– Descubrir las potencialidades que ofrecen las diferentes generaciones.
– Preparar a la persona mayor en la organización de su propia vida.
-Tomar conciencia de la riqueza de la persona, en las diferentes etapas
-Sensibilizar a los más jóvenes de la necesidad de vivir juntos ya que estamos convencidos que un abuelo tiene todavía mucho que ofrecer.
– Promover la conciencia de utilidad y autoestima.
Estas pautas, son las que marcamos a nuestros cuidadores de personas mayores para que ayuden a los abuelos a sentirse más vitales y útiles, generar diferentes espacios y actividades para que los abuelos puedan vivir esta etapa de su vida de la mejor forma posible.
¡Hasta la próxima!
(Imágenes vía Pinterest)
