El estrés de ser madre es a menudo una nube negra que oscurece la maravillosa experiencia de la maternidad. De esta manera, lo que debería ser uno de los momentos únicos y bellos de la vida, esos que luego se recordarán por siempre, se vuelve un drama, una angustia y por qué no, un pesar.
Es que el estrés maternal golpea fuerte tanto a primerizas como experimentadas. La presión social sobre las madres es muy fuerte, imponiendo a las mamás un modelo ideal donde ellas deberían ser tal o cual cosa, y ante la imposibilidad de cumplir ese estándar, muchas mujeres se frustran, se entristecen y se estresan.
Queremos ayudarte a que estés mejor en esta etapa tan especial de tu vida
La maternidad es sin duda un gran reto, una experiencia transformadora, de la que no se saldrá nunca más en la vida. Pero también es una cuestión de máxima exigencia, donde debemos cuidarnos a nosotras mismas tanto como a nuestras crianzas.
Para evitar el estrés de ser madre hemos investigado entre las opiniones de los especialistas con el fin de poder dejarte algunos consejos que creemos que te ayudarán.
Trata de implementarlos de a poco en tu vida, en tu día a día. Aunque consideres que no estás estresada, escucha lo que te comentamos aquí. El estrés maternal es un mal que aqueja a muchas mujeres de manera silenciosa y desapercibida.
5 consejos para evitar el estrés de ser madre
Ahora sí, vamos con esas recomendaciones para evitar o combatir el estrés de ser madre:
- Para prevenir el estrés de ser madre apóyate en tus seres cercanos. Esto es un ideal, pero es necesario que busques redes de apoyo en tu propia familia o en amigos. Cuando decimos redes de apoyo, nos referimos a personas que estén en la misma situación de maternidad que tú, para que te puedan comprender y ayudar. Una simple conversación sobre los problemas en común verás que bien te hace al espíritu.
Sino encuentras esa contención en tu familia o en amigos, busca en otras familias cercanas: madres de compañeritos de colegio de tus niños, o incluso puedes buscar a través de las redes sociales. Esta es una gran herramienta para encontrar personas en la misma situación que uno, con las mismas problemáticas. De esta manera créenos que te sentirás acompañada, verás que lo te sucede no es tan extraño y que puede haber gente que te eche una mano cuando lo necesites.
- ¡Delega! Es una lección que debemos aprenderla todos en todos los ámbitos de nuestra vida. Y no es sólo delegar tareas y responsabilidades al papá del niño, sino también confiar en que, si lo hemos dejado con los abuelos, pues que estará bien cuidado y que nuestra suegra no se olvidará de tal o cual cosa que haya que hacer. Cuando te apoyas en otras personas para cuidar al niño, podrás tener un tiempo para ti, para estar bien tú. Y eso es tan importante como que te esmeres en cuidar de tus hijos.
- Previene el estrés de ser madre priorizando las tareas. ¿No tienes tiempo para ser madre y limpiar la casa? Evalúa contratar un servicio de limpieza profesional. ¿Trabajas todo el día y luego no tienes energía para ser madre? Balancea tu tiempo de la manera que menos se resienta tu rutina. ¿Hace 6 meses que no haces actividades para ti sola? Evalúa hacer un hueco en la agenda una o dos veces a la semana y ve cómo puedes tomarte un tiempito para ti. ¡Prioriza! No todo puede valer lo mismo; el tiempo de reflexión que inviertes en esta priorización verás que lo recuperarás en salud y bienestar.
- Confía en ti misma. En el correr de la vida y de los embarazos, las mujeres van desarrollando cada vez más su instinto maternal y su sabiduría, cuenta con más experiencia y alcanza mejores herramientas para afrontar un nuevo embarazo, el posparto y la crianza de los niños. Entonces, confía en ti, en tu manera de manejar los tiempos y las emociones y en lo que has aprendido en todo este tiempo.
- Por último, pero fundamental para combatir el estrés de ser madre: no creas el “Mito de la Madre Perfecta”.Ya es hora de acabar con ello: no hay, no existe, un modelo único de maternidad. No tengas pudor o miedo de decir que estás cansada de tus hijos y necesitas un refresco. Salir a dar un paseo o tomar un turno en un gimnasio. ¡Hazlo! Nadie debe juzgarte por ello. Pero si no lo dices y lo ignoras o lo reprimes, lamentamos decirte que de a poco el estrés de ser madre te alcanzará y será difícil evitarlo.
¡No llegues a eso! Aplica estas recomendaciones que te hemos dado aquí en nuestro blog de Maid in Barcelona, te ayudarán de aquí a un tiempo si las mantienes a sentirte mejor contigo misma.
Por tu salud y por la de tus hijos, porque en tu bienestar emocional, mental y espiritual, también está su bienestar.
¡Nos volvemos a encontrar en el próximo post!