La desorientación en ancianos es un problema habitual, mucho más de lo que somos conscientes muchas veces. Lo que sucede a menudo es que es difícil de detectar, y requiere de estar muy atentos al comportamiento diario y constante del anciano. Otras veces sus síntomas se camuflan con otras patologías o, incluso, son subestimados por el entorno, tomándolo como algo natural o propio simplemente de la edad y que no requiere de un tratamiento especial.
Por todo ello, hemos decidido en Maid in Barcelona darte algunas herramientas para que puedas identificar cuándo tu familiar o adulto mayor a tu cuidado está atravesando una patología de desorientación, así darte algunos consejos para tratarlo desde el entorno. ¿Nos acompañas?
¿Qué es la desorientación en ancianos?
La desorientación en ancianos, o delirium puntual por su nombre clínico, es un tipo de afección cognitiva que afecta a personas generalmente por encima de los 70 años. Se puede generar por distintas causas, tales como deficiencias de vitaminas, bajos niveles de sodio y potasio, traumas físicos, infección urinaria, entre otras.
Este trastorno es realmente común, pero no deja de ser muy peligroso por otros daños secundarios que puede provocar. Además, claro, afecta considerablemente la calidad de vida y la capacidad para realizar actividades diarias del anciano de una manera independiente.
¿Cómo identificarla? Algunos síntomas
La desorientación temporal en ancianos se caracteriza por provocar confusión y pérdida de la orientación en cuanto a tiempo, lugar físico o individuo con el cual se está interactuando. Es muy común que nuestro abuelo por momentos no sepa dónde está, qué hora es o con quién está conversando, aun cuando hace sólo unos instantes estaba perfectamente consciente sobre todos esos detalles.
Si estás al cuidado de personas mayores ya sea por lazo familiar o porque eres un acompañante o profesional, aquí te contamos cómo identificar los síntomas de la desorientación en ancianos, algo que es fundamental para poder proporcionar el apoyo adecuado al paciente.
- Desubicación en tiempo y lugar: Este es el principal síntoma. El anciano desorientado olvida la fecha en la que estamos, el día de la semana o incluso hasta la estación del año actual. O bien, pueden tener dificultades para reconocer un lugar familiar o encontrar el camino de regreso a casa.
- Problemas de memoria: Otro síntoma muy común es la pérdida de memoria. Esto lo notamos en cuestiones como que olvidan algo que sucedió recientemente, o también algo lejano, pero que fue muy significativo en su vida.
- Desconexión del entorno: Los adultos mayores desorientados pueden presentar problemas para reconocer a familiares directos y amigos cercanos.
- Trastornos en el comportamiento: La desorientación también puede afectar la forma en la que se comporta el paciente, volviéndose más irritable, introvertido o apático, entre otros aspectos sociales.
Ejercicios para combatirla
A continuación brindamos algunos ejercicios y consejos útiles para combatir la desorientación en ancianos. Tenga en cuenta que siempre, lo mejor, es antes de poner en práctica alguna de estas recomendaciones consultar con un profesional especializado.
Estimulación cognitiva: Los ejercicios que desafían la memoria y la capacidad de atención del abuelo pueden ser beneficiosos. Entonces, practicar junto con él juegos de memoria, armar rompecabezas de mediana dificultad y realizar actividades que involucren la recuperación de información pueden ayudar a mantener activa la mente (aquí algunos juegos para personas mayores que te van a encantar).
- Orientación temporal y espacial: Ayudar al anciano a mantenerse dentro de una estructura clara y consistente en el día a día le puede ser muy útil para permanecer orientado. Bajado a lo práctico, es buena idea incentivarlo a que utilice calendarios, relojes y señales visuales que le marquen el lugar en el que está.
- Rutinas y familiaridad: Relacionado a lo anterior, el ayudarle a crear y sostener rutinas regulares lo ayudará a ganar seguridad y orientación. Es importante, por lo tanto, evitar cambios drásticos en su quehacer habitual, de la misma manera que no es bueno extraerles de su lugar diario o realizar grandes cambios físicos en el mismo (por ejemplo, mover de sitio un sillón que utiliza todos los días para descansar).
- Comunicación asertiva y clara: En las comunicaciones con el anciano desorientado, sea claro, use frases cortas y no use más palabras que las que aportan estrictamente valor a la conversación.
- Contexto de bienestar emocional y social: Sin dudas, el punto más importante. La desorientación en ancianos les produce miedo, frustración o ansiedad. Sepa contener estas emociones con calidez, amor y buenos cuidados en todos los detalles.
Desorientación en ancianos: Conclusiones
Como hemos podido ver aquí, la desorientación en ancianos es un problema que va más allá de un momento. Puede traer consecuencias dolorosas, tanto desde lo psicológico como desde lo físico, como ancianos extraviados, perdidos en la calle, o sufriendo accidentes que podían haber sido evitados.
Si bien te hemos dado consejos útiles para implementar en el cuidado de ancianos, nos parece importante volver a recalcar que estos son cuidados paliativos. Lo mejor, en estos casos, es asistir a un grupo de profesionales que nos ayude a contener al anciano que sufra este tipo de situaciones.
La desorientación en los ancianos es un desafío común, pero con el apoyo adecuado, puede ser tratada de manera exitosa. ¿Lo más importante? Identificar los síntomas a tiempo, poner en práctica ejercicios de ayuda, tratar siempre al paciente con cariño y amor y, claro, consultar con un especialista para que nos ayude, desde su experiencia, a brindar a nuestro ser querido la mejor calidad de vida en sus últimos años.
¡En Maid in Barcelona estaremos siempre para satisfacer tus consultas y ayudarte!
